Tegucigalpa, 2 de julio (Télam).- El Congreso de Honduras, a petición del presidente de facto, Roberto Micheletti, decretó el miércoles la suspensión de las garantías constitucionales de la ciudadanía, mientras continuaban las manifestaciones en contra y a favor del golpe de estado que derrocó al presidente Manuel Zelaya.
Las garantías estarán suspendidas mientras dure el toque de queda implantado por el gobierno de facto, desde las 22 a las 5 (hora local) del día siguiente, según reportó la agencia italiana Ansa.
El decreto tiene el propósito de reducir las manifestaciones en apoyo a la restitución de Zelaya, quien fue capturado en forma violenta por los militares y expulsado a Costa Rica el pasado domingo.
El Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras considera que la suspensión de las garantías constitucionales de la ciudadanía constituye una "violación gravísima" a la legislación del país y de los tratados internacionales, porque limita la libertad de reunión y la manifestación pública.
La aprobación del decreto contrasta con las declaraciones que dio ayer Micheletti asegurando que hay tranquilidad en el país y que los hondureños han vuelto a sus actividades normales.
Unas 20.000 personas participaron en la manifestación realizada el miércoles en Tegucigalpa por las organizaciones populares en apoyo al regreso de Zelaya, también hubo protestas con bloqueos de carreteras en los departamentos de Olancho, Colón y Santa Rosa de Copán.
Los manifestantes gritaron, entre otras consignas, "Mel, amigo, el pueblo está contigo", "Mel viene y nadie lo detiene" y "Fuera, fuera, Micheletti".
El Consejo Coordinador de Organizaciones Campesinas, la Confederación Hondureña de Mujeres Campesinas y el Consejo Nacional Campesino, denunciaron, mediante un comunicado, que las jornadas de protestas que comenzaron el domingo dejaron 55 heridos y más de 120 personas detenidas por militares y policías.
El comunicado hace un llamado a las organizaciones populares a mantener "la resistencia y la movilización popular en forma definida en todas las regiones del país" hasta que Zelaya sea restituido.
La Unión Cívica por la Democracia, que aglutina a los adversarios de Zelaya, también realizó movilizaciones "por la paz" en Tegucigalpa y en las ciudades de Choluteca y La Ceiba, con el argumento de rechazar supuestas injerencias de los mandatarios de Venezuela, Ecuador y Nicaragua.
En Tegucigalpa los simpatizantes del gobierno provisional se reunieron anoche frente a las oficinas de las Naciones Unidas, donde mantuvieron velas encendidas y exigieron el respeto a la "autodeterminación" de los hondureños. (Télam)Fuente:http://ar.news.yahoo.com/
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